Según el estudio “Ventajas del sulfato de magnesio en anestesiología” la combinación de este componente podría traer beneficios en procesos de anestesia.
“El objetivo de la investigación es ofrecer conocimiento actualizado de las ventajas, recomendaciones y estudios para las diferentes áreas relacionadas con el uso de sulfato de magnesio”, dice Romero.
El componente tiene múltiples beneficios en combinación con el uso de anestésicos, por ejemplo, se observó que es capaz de reducir la incidencia del temblor post-operatorio y tiene una moderada acción vasodilatadora que es una función cardio-protectora y anti arrítmica.
Además reduce la respuesta del sistema central en pacientes con anestesia general en procedimientos de laringoscopía, pues si bien el riñón filtra este componente, la mayor parte es reabsorbido y solo se llega a eliminar un tres o cinco por ciento de la cantidad aplicada.
Para el estudio se hizo una revisión exhaustiva de 114 artículos científicos y el análisis bibliográfico de ensayos clínicos de libre acceso, publicados entre noviembre y diciembre del 2020.
Dentro de las conclusiones se recomienda profundizar los efectos combinados del sulfato de magnesio y las anestesias para poder fijar dosis maximizando sus beneficios.
Origen
El sulfato magnesio fue descubierto en 1618 por un granjero inglés de apellido Epsom. El hallazgo surgió cuando notó que sus vacas se negaban a beber agua de un pozo cercano, pero que al rociarlas con ésta se curaron de las erupciones y sarpullidos. Desde entonces se le dio el nombre alternativo de sales de Epsom, que eran en realidad el sulfato de magnesio hidratado (MgSO4 · 7H2O).
El magnesio desempeña diversas funciones en el organismo y el cuerpo tiene varias fuentes para poder obtenerlo dentro de la dieta como por ejemplo: Cereales , semillas , granos enteros, carne de pescado y vegetales verdes.
Sin embargo en la versión de sulfato puede aplicarse de manera intravenosa, aunque tiene una acción rápida pues sus efectos aparecen a los diez minutos y desaparecen a los treinta minutos, por lo que se tiene una alternativa una infusión del mismo.
Por: Fabricio Salazar Martínez
